Phomopsis amygdali Del.
Descripción
Hongo ampliamente distribuido en todas las zonas frutícolas de España, que afecta principalmente los cultivos de almendro, melocotonero, nectarina y albaricoquero.
Esta enfermedad es típica de las zonas litorales donde las temperaturas son más suaves que en las zonas interiores más frías.
Mayoritariamente el hongo se propaga durante la primavera (mayo y junio) por la lluvia y también por la humedad elevada y el rocío, lo que provoca un goteo que arrastra los conidios (esporas) de un brote a otro, concentrando las infecciones en la parte baja de la copa de los árboles. También se producen infecciones en otoño durante la caída de las hojas.
Síntomas y daños
El síntoma más visual es la desecación de los brotes afectados, que en ataques graves acaba secando la parte inferior del árbol, dándole un aspecto muy característico.
En las ramas afectadas se observan chancros ovalados, algo deprimidos, de color marrón que se extienden generalmente en torno a las yemas, los cuales se pueden confundir con los chancros producidos por monilia. Cuando el chancro anilla las ramitas, éstas se desecan, se marchitan y mueren. El hongo también produce una toxina llamada fusicoccina, que transportada por la savia provoca el cierre de los estomas secando los brotes en sentido descendente. Raramente se observan necrosis en hojas. Si los ataques son intensos se produce una importante pérdida de cosecha.
Periodo crítico para el cultivo
Las condiciones meteorológicas que favorecen la infección son las temperaturas suaves, la humedad alta y las lluvias durante la primavera, sobretodo mayo y junio.
El otro período a tener en cuenta es en otoño, cuando se produce la caída de las hojas.