Saissetia oleae Bern
Descripción
La cochinilla es un homóptero que afecta al olivo, cítricos y otros frutales como el pistachero.
La hembra alcanza, en estado adulto de 3 a 5 mm de longitud, tiene forma semiesférica, y es similar a un grano de pimienta, de color marrón cada vez más oscuro. Posee un relieve en forma de H característico. Las hembras son inmóviles y quedan adheridas a la planta. Se desconoce el macho (reproducción por partenogénesis).
La hembra deposita más de un millar de huevecillos que quedan debajo de su cuerpo. Los huevos son elipsoides, de color rosado, de un tercio de mm de longitud.
Las larvas tienen contorno ovalado, son inmóviles, de color terroso o amarillento, con longitud inferior a 3 mm.
Tiene este insecto, en general, dos generaciones anuales. Al comienzo de la primavera, aparecen las primeras larvas que se fijan en nuevas brotaciones normalmente sobre el haz, en el nervio central. Cuando completan sus dos mudas se dirigen a las ramas, transformándose en adultos en verano. Los adultos más precoces de esta primera generación pueden dar lugar a una segunda, empezando a dar larvas desde ese mismo otoño.
Síntomas y daños
Esta plaga produce daños en primavera y verano hasta que las temperaturas se elevan por encima de los 32 °C. Suele preferir los árboles de crecimiento vigoroso.
Se manifiesta por la presencia en las ramas y ramillas de una especie de costras o verrugas semiesféricas, que son las hembras, produciéndose un debilitamiento generalizado de la planta por succión de savia.
También produce un daño indirecto porque segrega una sustancia pegajosa y azucarada como melaza que embadurna las hojas y ramas, que propicia la aparición del hongo negrilla, restando capacidad fotosintética a la planta.
Periodo crítico para el cultivo
La brotación y floración de los árboles es un período crítico.